Periodísmo y literatura

La literatura es una de las formas de la cultura que utiliza la lengua y el lenguaje como medio de expresión. También es considerada un arte ya que promueve la ampliación del capital simbólico y el imaginario de los receptores del texto literario y también de quienes escuchan relatos orales.
La literatura se vale de la realidad para incitar a la construcción de mundos alternativos llamados ficcionales, donde conviven personajes que realizan acciones ideadas por un autor. Por el solo hecho de poseer esta última característica la literatura parece distanciarse del periodismo, ya que este se ocupa solo de la realidad, de informar y captar periódicamente las opiniones sobre lo que acontece en la sociedad y a los ciudadanos.
El hecho de que en la literatura se trabaje con la ficción, con la representación a través del lenguaje, no quiere decir que sea falsa. La literatura no refleja la realidad, no la copia, funda su realidad a través de las palabras. Platón afirmó que toda forma de arte es siempre una actividad de mimesis, es decir, una representación, una copia más o menos semejante, de un objeto o un acontecimiento. El ser ficcional es la característica más propia del lenguaje literario, es una característica necesaria para definirlo.
En la literatura la verdad está dada por la verosimilitud, un término que alude a algo que tiene apariencia de realidad, de credibilidad. que puede suceder en el plano de lo real. En cambio en el periodismo la noticia deber ser cierta, que verdaderamente haya sucedido y que pueda ser constatable. También en el periodismo existe una rama llamada periodismo literario.
El periodismo y la literatura se alejan si se usa como punto de comparación géneros como la poesía, la novela, el cuento y el ensayo donde la subjetividad, y el conocimiento de la psique profunda del ser humano juegan un papel importante. Pero, se entrelazan por el uso del lenguaje y por el trabajo intelectual que se lleva a cabo en géneros como la biografía, el testimonio, el diario, las confesiones, y sobretodo en la crónica que tiene dos vertientes: crónica literaria y periodística. En literatura la crónica es un género que es considerado fronterizo, porque se halla entre el cuento y el periodismo, debido a que hecha mano de varios elementos pertenecientes al relato, a la narratividad propia del cuento y en lugar de ubicarse en un mundo posible e imaginario, toma de la realidad elementos de la historia o de la cotidianidad.
La crónica periodística narra un hecho real pero aderezado con opiniones personales. En la crónica periodística el discurso está relacionado directamente con el devenir cotidiano y temas del dominio público, está escrita de una manera ágil, reflexiva y sugerente con el fin atrapar al público y permitirle discriminar entre los distintos sistemas de representación de la realidad destinados al espacio público, delimitada por criterios de verdad-ficción impuestas al periodismo y la literatura.
Otro caso en el cual la literatura y el periodismo se emparientan es en el testimonio ya que en este género se busca elaborar un mensaje transparente, que parte desde la experiencia, cuenta algo en lo que se ha participado o nos habla de un proceso del cual se ha sido testigo. El discurso testimonial suele ser referencial y desea aportar un valor de verdad, siempre supone que existe otra versión de los hechos que se cuentan.
El testimonio supone la ruptura con las convenciones básicas de lo literario y en la relación directa de su discurso con la verdad., ya que centra mas su interés en lo que se dice, sin dejar de lado como se dice, aunque en algún punto los hechos reales se configuran de tal manera, que la realidad alcanzará un estadio de producto estético, por lo tanto literario.
Periodismo y literatura. Dos conceptos. Dos mundos alternos que conviven, comparten y que también se distancian en ciertos aspectos a los que nos aproximamos a través de este pequeño ensayo.

Comentarios

Unknown ha dicho que…
Está muy bueno tu blog. Saludos.
Jesús Miguel Soto
Gabriela Durán Arnaudes ha dicho que…
Hola Jesús Miguel, muchas gracias por tu comentario. Por cierto ¿tu estudiaste en la Escuela de Letras?

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